Otra vez siento que estoy sola. Siempre lo he estado, claro. Pero ahora lo siento más; tengo a mis dos hermanastras conspirando contra mí, y la más mala y fea, Anastasia, le dijo a mi padre que he estado saliendo por las noches, a fiestas, estando el DF tan inseguro como está.
Por supuesto, el tumulto clama: "Oh por Dios, pero tu hermana sólo quiere protegerte, qué desconsiderada e inmadura eres criatura, un monstruo que Dios envió a sus hijos como castigo de sus más oscuras tentaciones..."
La cosa, es ésta; falta un poco de contexto sobre mi vida.
Anastasia es la hermana que NUNCA se ha preocupado por mi. El semestre pasado apenas y le interesaba. El semestre antepasado, no existía para ella.
El semestre antepasado, cuando yo salía de noche (cabe destacar que la situación del narcotráfico estaba aún peor porque escuchábamos balaceras cada semana) Griselda era la única que me preguntaba siempre a dónde iba. Con quién vas, cómo te regresas, a qué hora te regresas, quién te viene a dejar, etc.y Anastasia parecía pasarle por el arco del triunfo, y eso hasta cierto punto me desconcertaba, pero no lo tomé a mal.
Me quejé con mis padres, más en tono irónico que molesto, diciendo que Griselda era una preocupona, esquizofrénica-posesiva, pero que de una manera u otra la entendía porque era la mayor.
En el semestre siguiente, Anastasia no deja de hablarme. Estoy en una fiesta, y habla por teléfono. ¿quién carajo se cree que es? nunca se ha preocupado por mí, NUNCA, le da igual si me duele un pie o si me estoy muriendo, si gané el concurso de oratoria en mi prepa (más bien se enfoca en quitarme mis logros y opacarlos) o la vez que me robaron la maleta cuando fuimos a Chicago (¡Por Dios, dijo: "sólo cómprate ropa nueva, ya me quiero largar de ésta pocilga").
Y a puesto a que le dijo a mis padres que me regañaran y me dijeran que no salga más. ¿Quiere saber porqué estoy enojada? Ahí está su respuesta. Es una pésima hermana. Y ahora está enamorando a Griselda con sus cantos de sirena, envenenando su mente y su corazón. Pero yo sé que Griselda es más que eso.
Quería estar bien con ella. De verdad lo intenté; escuché todas las tonterías que tenía que decirme, soporté que comiera y usara mis cosas, que me dijera estupideces, que me trajera como su perro. Pero ya no soy su perra; antes de corazón, no quería enojarme con ella, ahora ¡Que se vaya a la mierda!
Es mi hermana, pero no le da derecho a tratarme como su trapeador.
En fin. Me siento sola, y sigo sola. Y todo indica que así seguiré. No tengo novio, no tengo a mis amigos cerca, y al parecer mis hermanas me dan la espalda. Mi único consuelo es desahogarme sobre estas tristes líneas y dejar ir todo mi pensamiento, exprimir todo mi ser.
Hace una semana me sentía bien. Ahora me siento infeliz. Pero así soy, temperamental, dramática y una montaña rusa sobre un teatro.
Como sea...
...Finge preocupación por mí. Vaya pelmazo si cree que me trago ese cuento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario