domingo, 13 de noviembre de 2011

"En las elecciones del 2012 veremos qué tan inteligentes son los mexicanos... Aunque a juzgar por el sistema de la SEP, apuesto a que ganará el PRI"

viernes, 11 de noviembre de 2011

Homesick

Vivir lejos de casa te hace apreciar el nido que dejaste;vuelas tan alto y tan cerca del sol, que su calor derrite tus alas y extrañas el firmamento que pisaste una vez.

Extraño mi hogar.

Extraño el hecho de que allá siempre tenía un lugar para cada cosa; y si no, mis papás me compraban algo para organizarlo, un mueble extraño y bonito, un armario enorme (y ropa para llenarlo) más muebles inn, gavetas, tocador, etc.

Todo en pos de la organización y de que mi cuarto se viera hermoso.

Ahora lo extraño muchísimo. Extraño que mi cuarto estaba impecable, no porque yo fuera cuidadosa, sino porque mis padres estaban detrás mío, regañándome para componerlo.
En cambio aquí, es semana de parciales, trabajos finales, y se acercan exámenes finales, y esto es una verdadera pocilga; y es que en dos días, tuve tres exámenes y una exposición de trabajo final (de esas donde hay jueces, vestiditos formales y tacones) y muy poco tiempo para comer, aproximadamente dos comidas al día, con mucha suerte (en toda la semana).

La ropa sucia de dos semanas está amontonada en dos canastos enormes que parecen no tener fin; cuando usualmente mi ropa sucia está doblada organizadamente, y cada calcetín con su respectivo par (aunque CLARO, como en vez de pensar en trivialidades como SI MIS CALCETINES COMBINAN, pienso en si voy a pasar el examen de termodinámica -y cómo lo voy a pasar-) en cambio ahora, tengo suerte si consigo aunque sea dos pares del mismo color.

Hay cajas vacías por doquier, cada una con su respectivo montoncito de basura (de papel escolar, claro), y el tocador no tiene comienzo, ni fin. Es como una de esas revistas de buscando a Wally, pero más retador; si consigo mi peine en menos de media hora, ¡ya la hice!.

El refrigerador vacío. Sólo queda miel, pan (los que han sido mi desayuno estos últimos días) mayonesa y otros aditivos que no pueden comerse por sí solos.
Hoy fui al súper y llegando organicé el poco espacio que tengo.

Es viernes por la noche, 09:57, y en vez de salir con mis amigos, estoy acomodando todo... porque así les gustaría verlo a mis padres, porque así se sentirían orgullosos de mi, en fin; porque así me educaron.

Porque se vive mejor cuando cada cosa tiene su lugar en esta vida. Todo, incluso los cuartos, los pensamientos y las prioridades.

Tags

Es difícil cuando se le trata de poner etiquetas a los sentimientos, tal vez porque los vemos desde nuestra perspectiva y todo depende del cristal con que se mire. Me deslumbran los sentimientos, dificultándome el poder juzgarlos y reconocerlos.

Ayer empezaron a hablar de sus antiguos amores, con historias con finales felices y otros más pasionales; pero amor al fin.

Y me di cuenta de que yo no tenía una historia así... ni siquiera con Vince, en alemán. Nada.

Sentí un vacío en mí que no pude identificar como nada más que eso. La falta de algo.

Pero en verdad me gustaría poder reconocer qué es lo que pasa y porqué, tal vez me hace falta meditar más, pero sumida entre tantos exámenes, he olvidado, sobre todo, sentir.